Los 6 secretos del señor Lobo para tocar el cielo de la efectividad

En Pulp Fiction hay un personaje que destaca por su claridad y sus frases demoledoras. El señor Lobo, Mr. Wolf para los yankis, interpretado por Harvey Keitel, nos ofrece unas lecciones de efectividad personal y profesional que no deberías dejar escapar.

1. Ten claro como aportas valor y explícalo fácil. «Soluciono problemas»

Dos gansters han matado a un tío y tienen el coche perdido de sangre. Esperan por el señor Lobo para sacarles del lío.

Hola, soy el señor Lobo, soluciono problemas»

En menos de 7 segundos, saluda, se presenta y explica los beneficios de su presencia allí.

¿Cuánta gente te ha contado a qué se dedica y ni te has enterado?

Parece que mientras más apellidos y palabras en inglés tenga un trabajo mejor, queremos impresionar sin darnos cuenta que lo único que conseguimos es espantar con nuestro discurso enlatado.

¿Cuál de estas dos posibles frases del señor Lobo te gusta más?

Hola soy el señor Lobo, soy técnico controller de gestión de situaciones comprometidas y expert manager en administración y dirección de equipos limpia-fiambres”.

Hola, soy el señor Lobo, soluciono problemas”

Vete al jodido grano, a la gente le da igual tu carrera o lo que hayas hecho antes, lo único que quieren es saber cómo puedes aportarles valor, no dormirse mientras alimentas tu ego con palabrería vacía.

2. Los pequeños detalles cuentan. Disfruta ese café como Mr. Wolf

Tienen un cadáver esparcido y están pelados de tiempo; sin embargo, el señor Lobo se permite el lujo de tomarse un café, darle un largo trago, disfrutarlo durante unos segundos y darle la enhorabuena a Jimmy.

Es mi parte favorita, como se para a disfrutar y felicitar al artista, es la exaltación del ahora, da igual los gángsters y el fiambre, durante esos 4 segundos sólo existen él y el café. Genio.

Tienes mil cosas por hacer, acabar ese artículo, contestar ese email; todos estamos liados pero eso no debería impedir disfutar y agradecer pequeños detalles. Al final ese momento es lo único que tienes.

3. Lo mejor es enemigo de lo bueno

Sangre y trozos de cerebro esparcidos por la tapicería del coche, toca limpiar. El Señor Lobo da instrucciones: “No hace falta sacarle brillo, no se usa para comer, límpienla a conciencia una vez”.

Limpiar la tapicería al detalle les condenaría a no acabar a tiempo, bien es suficiente, producto mínimo viable, no más.

Yo lucho a diario contra mi incapacidad crónica para ver las cosas del todo bien. Es una lacra y me hace ineficiente. Por eso desde hace un tiempo aprendo a valorar lo “bueno” frente a lo «perfecto».

Me he dado cuenta que llegado a un punto la posible mejora sólo es visible a mis ojos, no para el cliente o lector. Empeñarse en poner la guinda estropea el pastel.

4. Autocomplacencia. Una de las mejores frases del señor Lobo

La mayoría de las frases de Pulp Fiction son geniales, no obstante este señor se lleva la palma.

Tras darles la enhorabuena por limpiar el coche y escuchar a Jimmy sorprenderse por el gran resultado el señor Lobo rebaja el triunfalismo soltando una de esas frases para la historia:

No empecemos a chuparnos las pollas todavía”

Tienen un objetivo definido y los pequeños avances, por buenos que parezcan, nada significarán si este no se consigue. El Sr. Lobo zanja cualquier atisbo de autocomplacencia, un peligro que suele interponerse en el largo camino hacia una meta.

Utiliza tus pequeñas victorias como impulso y motivación; no te acomodes y sigue avanzando, el verdadero premio está al final.

5. Llega antes. La puntualidad del sr. Lobo

Te está diciendo esto un impuntual de siempre. Ver lo satisfactorio de la puntualidad me ayuda a arreglarlo; hay mucha diferencia entre llegar antes y tener tiempo para preparar mentalmente la situación o llegar pensando cómo justificar el retraso.

Si siempre has sido puntual no te supondrá tanta satisfacción, pero a mí, con mi larga trayectoria de impuntualidad, me flipan los resultados.

Otra cosa que he aprendido es a generar bajas expectativas respecto a la entrega de algún trabajo o la asistencia a algo. Si logras entregarlo antes el cliente valora un esfuerzo extra. Y si no habrás ganado un precioso tiempo. ( OJO esto servirá siempre que no aproveches ese margen extra para caer en el fango de la procrastinación)

El Señor Lobo lo lleva más allá, «estoy a 30 minutos, llegaré en 10” y aparece incluso antes, lo que dispara la sensación de confianza en él.

6. Apúntalo todo.

Al comienzo de la escena vemos al Sr. Lobo anotando datos muy útiles para conocer la situación. Si no los apuntara, y le pasara como a mí, se le olvidarían.

¿Soy el único que tiene una idea genial que me parecería imposible olvidar y…se me olvida?

La mente es muy buena creando pero muy mala recordando; es la base del sistema que utilizo de gestión de la atención, GTD. Anotar las ideas o tareas que vienen a la cabeza permite liberar a la mente de la necesidad de recordarlo, con la confianza de que cuando sea el momento de gestionarlas nada se me habrá olvidado.

¿Cuántas veces te has sentado en una reunión con alguien sin un mísero papel y boli? Con eso transmites que estás allí para decir tu mensaje, sin demasiado interés en recordar nada de lo que digan los demás.

Ideas resumen

  • La gente necesita saber qué puedes hacer por ellos, el título universitario u otros papelitos firmados por el rey donde pone lo bueno que eres sólo le interesan a tu madre.
  • Ahora es el único momento que tienes, disfrútalo por encima de todo.
  • No empecemos a chuparnos las pollas todavía. Utiliza tus pequeñas victorias para impulsarte no para triunfalismos que te acomoden.
  • Llega antes de lo esperado.
  • Tu mente es muy buena creando y muy mala reteniendo. Hazle ese favor y anota tus ideas por escrito.

Aquí tienes la escena completa del señor Lobo en Pulp Fiction. Disfrútala con calma y vuelve a leer lo que nos enseña este genio de la efectividad.

¿Te sientes identificado con alguna de las lecciones del señor Lobo?

¿Conoces a alguien al que le vendría bien? ¿A ti también te flipan las frases del Sr. Lobo? Eres libre de poner burradas en los comentarios.

Hay gente que tiene muy buenas ideas y gente que tiene muy buenas ideas de mierda.

Aquí está la diferencia